Pregunta de una oyente:
Hola, Señor Consejero,
Me atrevo a escribirle porque me gustaría escuchar su opinión sobre lo que estoy viviendo en mi matrimonio. Me casé hace un par de años. Ahora mismo mi esposo y yo asistimos una iglesia local aquí en mi ciudad. También participamos en cursos bíblicos y en los grupos celulares.
Mi matrimonio es muy bueno; mi esposo en todo momento me hace sentir amada. Todo el tiempo estamos juntos; trabajamos juntos; nos llevamos muy bien.
Pero hace una semana atrás mi marido me dijo que le gustaría que miremos unas películas eróticas/pornográficas. Le confieso que en ese momento yo le dije: “No hay problema”, solo por complacerlo. Pero en lo más profundo de mi corazón no lo quiero hacer; sé que no es correcto; yo soy temerosa de Dios.
Estoy segura que si accedo a esto voy a contaminar mi matrimonio, pero mi esposo está muy entusiasmado en ver esas películas. Según me dice que la pasaremos muy bien; la verdad que tampoco le quiero decepcionar a él.
Me siento muy mal. ¿Por favor, dígame que hacer? Gracias
La confundida
Respuesta:
Apreciada amiga,
Gracias por sus preguntas; trataré de ser lo más breve, claro y concreto que pueda.
Definitivamente usted está correcta. Este tipo de actividades en vez de ayudarles como pareja, solos dañará y contaminará su relación. La pornografía es una atadura que tiene esclavizado a mucha gente. Usted me dice: Mi matrimonio es muy bueno, sin embargo, hay una solicitud en la mesa que le ha robado la paz. Esta petición de su esposo denota que algo no está yendo bien en la relación sexual, puede haber aburrimiento de su marido. También puede ser que en privado él esté accediendo a la pornografía.
Mi recomendación es que usted ve esto como una buena oportunidad para abrir una conversación franca con su marido. Puede ser que con esta sugerencia (ver juntos películas eróticas), él le esté diciendo: “No estoy satisfecho sexualmente”. Así que tome esta oportunidad para hablar específicamente como se podría mejorar su intimidad sexual.
Si necesitan ayuda externa, le recomiendo que visiten una librería cristiana local. Ahí encontrarán varios libros cristianos que nos dan sugerencias como mejorar su vida sexual dentro del orden de Dios.
Insisto, esta es una buena oportunidad para abrir buenas líneas de comunicación en el área sexual. Tome la iniciativa y haga las preguntas correctas. Por otro lado no tenga miedo de decirle a su esposo, que usted no quiere contaminar su alma con la basura de la pornografía.
Espero que esto ayude; seguimos en contacto.
Bendiciones
Ernesto Pinto
www.encuentro.ca
Y ahora, amados hermanos, una cosa más para terminar. Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza.
Filipenses 4:8 (NTV)